Aullidos en la soledad.

Colores >.<:

En la relativa oscuridad de la mansión Bloody era capaz de ver los intrincados dibujos que surcaban las paredes de aquel lugar. El cachorro miraba los extraños dibujos, algunos rasgados, otros descoloridos por la vejez.

El pequeño intentaba recordar como volver a su hogar, pero no era capaz de volver, aquellas imágenes no le revelaban nada, simplemente eran algunas fotos del mercado, y algunas entradas de Darkdust City. Las imágenes eran tan antiguas que su hogar nada más que era un brote.

BloodMoon se levanto y siguió investigando un poco mas la mansión, a su alrededor se encontraban muchos pokemon los cuales le miraban y proseguían su camino, los ruidos que le asustaban desde su entrada se dio cuenta que eran pokemon tirando cosas o chocándose contra ellas.

Tras un rato de investigar se encontró con un lloriqueo agudo, el echo a correr velozmente hacia el lugar de los llantos. Era un pequeño Litwick rodeado de Haunter. Sus intenciones no eran para nada jugar con el pequeño. Sin pensarlo dos veces salto y empezó a gruñir a los Haunter los cuales asustados huyeron, el Poochyena pensando que fue el salvador de Litwick se dio media vuelta y le empujo con la cabeza amistosamente.