Una Flor escarlata se encuentra con una Flor azul [Privado; Blue]

Un día soleado, las nubes paseando por el cielo despejado, dando esa sombra tan poco necesitaba pero agradable; los voladores, esos pequeños seres cantaban a todo dar sobre las ramas de los arboles llenos de hojas y siempre relucientes de su brillante y saludable verde. Un día bastante agradable, los ciudadanos paseaban de un lado a otro metidos en sus asuntos y aun así soltaban un aire de felicidad y tranquilidad. Blossom City ese día, parecía la ciudad perfecta, esa que todos tanto anhelan en poder formar su vida dentro de ella.

Me encontraba entrando al conocido Invernadero, ese lugar verde y lleno de salud, donde consigues las mejores flores, plantas e incluso pokémon del mismo tipo; un sitio bastante relajante. Traía conmigo un pantalón y camisa holgada, cargando como no, el cabello amarrado en una coleta; acompañada de mi fiel Zoroark, quien se encontraba olisqueando cada rincón, amaba los olores dulces y ese lugar era su paraíso -Bueno Zoru...no te puede quejar, este sitio es perfecto- Extendí mis brazos hacia ambos extremos tomando una buena bocanada de aire. Era la primera ves que visitaba el Invernadero y a diferencia de Diamond City en donde si encuentras una Flor saludable es un milagro, esté lugar era perfecto y una buena manera de salir de lo cotidiano. Estaba algo solo, claro era de esperarse a tan temprana hora del día, pero así era mejor, todo el Invernadero para mi y mi equipo -Salgan todos y disfruten el momento- Sin mas solté las Pokeballs al aire dejando que aquellos viejos amigos salieran a disfrutar del día; sin mas me tumbe en el suelo mirando el cielo -Ahora...a relajarse- Cerré mis ojos y me concentre en el sonido de la naturaleza, no me importaba en realidad si me quedaba dormida, aunque aqui entre nos...me preocupaba mas el echo del comportamiento de mi equipo, puede que todos estén en su ultima evolución pero, su comportamiento seguía siendo de unos bebes; confiaba en el echo de que Zoroark el mas "serio" de todos cuidara de ellos.

Mas el sonido de una maceta caer a pocos metros de mi, me hizo darme cuenta de que relajarse no era una opción -¿Quien fue?- Me levante de inmediato y coloque mis manos a la altura de la cintura, mi mirada era seria y mi tono de voz totalmente firme -Espero que no hayan lastimado a alguien- Parecía una madre regañando a sus niños, pero, esas caras de rudos haciendo un intento de hacer pucheros me calmaron -Bueno...- Suspire soltando toda rabia, sin mas comencé a acercarme al lugar del destrozo esperando que alguien no resultara herido con la caída de la maceta.

―¡Rayos, Wartortle! Te he dicho mil veces que dejes de hacer bromas como mojar gente, a nadie le gusta ser mojado de repente ―gritó una joven de cabellos castaños, mientras a su lado un niño parecía llorar―. Lamento mucho lo que hizo mi pokémon, señora. En serio que no lo hace siempre ―se disculpó con la madre del chico que su pokémon había empapado.

¡Es que… por Dios! Desde que había evolucionado, dejó de ser aquel pequeño Squirtle alegre y pasivo, que tropezaba y le daba miedo todo a ser un Wartortle bastante activo y bromista. Soltando un suspiro, volvió a disculparse mientras regresaba al diablillo a su pokéball. Estaba harta de aquellos problemas que tenía con su pokémon, debía empezar a aplicar vara para que él dejara de molestar a la gente.

Volviendo a suspirar, caminó en la hermosa ciudad de Blossom City, estaba ansiosa por conocer aquel lugar, por cosas de su vida jamás había podido visitarlo y ahora que se encontraba ahí estaba demasiado emocionada. ¿Qué visitaría primero? Una sonrisa impaciente se dibujó en su rostro, no debía correr, se dijo, se vería extraño si veían a una chica correr en la ciudad. Entonces su camino le llevó hasta la entrada del Invernadero.

―Qué hermoso… ―susurró mientras entraba, viendo la cantidad de pokémon que caminaban por ahí e incluso la fantástica vista verde que llenaba su campo de visión.

Ella conocía bastante sobre plantas, pero juraría que ahí había tipos que no había visto ni leído, incluso en algunas paredes elevadas había macetas con flores o hiervas. Sonriente se acercó al lugar, buscando un espacio para poder sentarse y relajarse, en cuanto encontró uno fue hacia él, sin embargo una maceta cayó justo enfrente de ella, haciendo que al hacerse hacia atrás cayera.

A sus oídos llegó una voz mientras se levantaba y sacudía su ropa, vaya, qué desastre. Cuando levantó su vista, fue capaz de visualizar a una joven bastante hermosa. Con cabello rojo y los ojos castaños, complementada con un cuerpo de envidia.

―H-Hola ―tartamudeó mientras veía a los pokémon que la acompañaban―. Qué pokémon más geniales tienes ahí ―dijo sinceramente sorprendida, mientras veía a cada uno en sus propios asuntos―. ¡Mi nombre es Blue! Y seré la Campeona de Khannos ―le dijo con una gran sonrisa en su rostro.

Sin embargo, como le sucedía de vez en cuando, la pokéball de Wartortle se abrió dejando salir a su pokémon busca-problemas, quien observó a la chica de cabellos rojos para después lanzarle un chorro agua en su rostro.

―¡Wartortle! ―exclamó la joven―. ¡Lo siento muchísimo, Dios! No puedo creer que lo haya hecho de nuevo. ¡Lo siento! ―repetía mientras hacía leves reverencias ante la chica.

Camine a paso apresurado mientras me acercaba al lugar de los echos, y como si fuera una escena del crimen me agache a investigar la tierra de la maceta, como si se tratara de la pobre victima -¿Y...quien fue?- Aun aquellos bribones no me habían respondido, así que sin mas me levante con mi mirada seria y fría, me cruce de brazos mientras que una corriente de aire gélida paso sin mas por nosotros, un breve recuerdo de Diamond City -Entonces...- Un breve susurro para luego sorprenderme por la cantidad de garras que señalaron al "Culpable" -Deino...- Lo mire de reojo como si una lucha de superioridad se trataba, el pequeño asustado solo corrió a resguardarse detrás de Haxorus; me sorprendía la traición y confianza que se tenían todos mutuamente, tales echos me daba gracia por lo que no pude aguantar la risa -Bueno...todo bien Deino tranquilo- Me agache a su altura para así brindarle una paleta acto seguido le di una a todos, para luego dejando todo problema atrás, voltearme ante las voces que provenían de mi espalda.

-Disculpa, si te lastime con la maceta- Di mis mas sinceras disculpas al percatarme de la victima aparte de la pobre maceta; ella era de cabello castaño, en si, una joven muy hermosa, la mire de arriba hacia abajo buscando alguna herida, al no encontrar ninguna suspire de alivio -Gracias- Sonreí ante su halago -Yo soy Jackye Onell...Líder de- No logre seguir hablando al ser detenida por un chorro de agua que paro directo en mi cara. Mis pokémon presentes dieron un salto sorprendidos ante tal echo, incluso Zoru se encargo de gruñir le al pequeño Tipo Agua por su "broma". Yo solo me quitaba el agua de los ojos, estaba completamente empapada de los hombros hacia arriba, ¿molesta? Como no iba a estarlo -Wartortle...- Susurre su nombre mientras mi mirada brillaba de la furia.

De reojo logre notar la increíble lucha de disculpas que echaba Blue, sin mas solté un largo suspiro para luego darle un par de palmadas suaves a la cabeza del zorro molesto -No hay problema- Sonreí tranquila hacia la chica, mientras que mis acompañantes soltaban un suspiro de alivio y Zoru quien era el primero en querer buscar problemas, ya estaba dando palmadas suaves a la cabeza del tipo Agua, su modo de presentarse; me eche a reír -Se como te sientes...he tenido que lidiar con la madurez de estos- Apunte con mi dedo pulgar hacia atrás en donde estaban aquellos grandes y fuertes pokémon quienes en su infancia estar metidos en problemas era diversión máxima. -¿Segura que no te hiciste daño?- Aun seguía con la duda encima, así que sin mas la solté mientras me secaba.

Las disculpas de la chica de cabellos rojos se disculpó por lo de la maceta, haciendo que Blue concluyera que la maceta caída no fue accidental. De hecho, había sido uno de los pokémon de la otra joven. Pero, restándole importancia meneó su mano de un lado a otro, pues no había sido su intención hacerlo… ¿no?

La chica se llamaba Jackye, y al parecer no era una persona normal, de hecho, estaba en presencia de la mismísima líder de algo, pero su Wartortle decidió echar a perder el momento cuando disparó un leve chorro de agua en su cara. Ay, Dios, y justo en una líder…

Los pokémon de Jackye observaron a su pequeño bromista con sorpresa y el Zoroark se encargó de gruñirle, pero su pokémon parecía estar en la mera paz, haciendo que la joven se irritase más de lo que ya estaba. ¡Sus bromas le podían costar muy caro!

Onell murmuró el nombre de su pokémon, haciendo que la chica empezara a disculparse hasta que soltó un suspiro, restándole importancia al asunto. Después le sonrió, haciendo que Blue pudiera respirar tranquila, pues los compañeros de Jackye parecían haberse relajado también. Las siguientes palabras de Jackye hicieron que soltara una pequeña risa, mientras la chica apuntaba a sus pokémon indicando la inmadurez que tenían.

―¡Sí, estoy muy bien! No pasó nada, tan sólo se ensució un poco mi ropa pero nada para preocuparse ―dijo mientras reía―. Este pequeñuelo debe aprender cuándo debe andar mojando a las personas y cuándo no ―se quejó mientras miraba con ceño fruncido a Wartortle y éste le devolvía la mirada.

¡Squirtle, vuelve!, gritaba la joven en sus pensamientos mientras recordaba todas las bromas que había hecho desde su evolución, ni siquiera sabía cómo era que salía de su pokéball sin que ella lo llamara. ¡Tenía que saber para poder evitar que sucediera! Mientras lo miraba le dio un cocotazo, haciendo que Wartortle soltara un quejido y le mirara enfadado.

―¡Ah, no empieces que tú te lo ganaste a pulso, jovencito! ―le regañó y el aludido tan sólo se cruzó de brazos―. Hay veces en que no sé qué hacer con él, anda suelto y no le entiendo… ―soltó un suspiro cuando volvió a dirigir su mirada a Jackye―. ¡Creo que te escuché decir que eras líder! ¿De qué gimnasio eres? ¿Cómo es? ¿Te entretienes allá? ¿Vienes aquí en tus tiempos libres?

Se calló cuando se dio cuenta de que estaba haciendo demasiadas preguntas, sonrojándose para después rascarse con ligereza la parte trasera de su nuca y mirase a Jackye algo avergonzada.

―L-Lamento las preguntas, es que me emocioné y yo… pues… ―bajó la mirada empezando a jugar con sus manos―. Es sólo que no te encuentras un líder de gimnasio todos los días, me emocioné.

La chica se notaba mas tranquila al ver que ya me había calmado, bueno, después de todo estábamos en un lugar "mágico" lo que menos quería era iniciar una huelga destruyendo el lugar, claro, sonaba divertido el solo pensarlo hacia que se me dibujara una sonrisa en el rostro, mas agite mi cabeza tratando de sacar de esa manera la loca idea que estaba rondando por mi cabeza; no podía hacerlo, digo, acabo de casi regañar al pequeño Wartortle por su travesura y ya iba a montar mi propia travesura, no no no ¿que ejemplo daría?. Un aura algo deprimente me envolvió en tan solo segundos, Zoru al notarla se echo a reír como si me leyera la mente.

Me salí de mis pensamientos al escuchar la pequeña discusión que tenia Blue con su compañero, no pude evitar sonreír alegre mientras recordaba aquellos similares momentos con Zoru cuando apenas era un Zorua -Bueno, hay veces en que deberías dejar que tu pequeño se divierta un poco...si dejas que se acumule toda su travesura explotara cuando menos te los esperes- Aquel zorro se echo a reír recordando su ves que exploto toda su travesura molestando a nada mas ni nada menos que un Gyarados dormido, desde aquella ves prefería vivir sus travesuras que retenerlo ademas daba gracias a Arceus que ahora siendo Zoroark ya ha madurado un poco -Y lo digo por experiencia- Mire de reojo y frunciendo el ceño a aquel compañero quien al percatarse de mi mirada se rasco la cabeza algo apenado.

Solté un suspiro mientras escuchaba a Blue, comenzando con que al menos escucho que era Líder, claro eso llevo a que me hiciera tantas preguntas; Menee ambas manos de arriba hacia abajo y con una gota estilo anime bajando por mi nuca tratando de que entendiera mi seña y se calmara un poco, cuando lo hizo no pude evitar sonreír tranquila -No te preocupes, ademas no tengo problemas de responder todas la preguntas- Incline levemente mi cabeza dándole una sonrisa sincera -A veer...- Me rasque la barbilla con mi mano derecha mientras recordaba sus preguntas -Soy la Líder del Gimnasio de Hielo, frió...y bueno son tres castillos, y tiene bar- Le susurre de manera burlona, para luego reincorporarme y cruzarme de brazos para seguir respondiendo -Si, es muy entretenido, aunque no se note por tanta nieve es un lugar muy animado- Respondí recordando de forma inmediata aquellas noches de fiestas que se montaban en el bar, no lo niego, fue buena idea construir un bar en el gimnasio -Sinceramente no....es la primera ves que paseo por estos lugares, y debo decir que es hermoso- Le eche una mirada rápida al lugar disfrutando del momento.

Tome aire para luego mirarla a ella -Entonces, ¿entrenadora no?...futura Campeona...te deseo la mayor suerte- Con el pulgar arriba exclame mis mas sinceros apoyos -Y ¿que tal te va? ¿Cuantas medallas? o ¿Que tan preparado esta tu equipo?- Ahora era yo quien hacia tantas preguntas, mis ojos brillaban de la emoción de conocer a una entrenadora y recordar aquellos tiempos en donde era entrenadora.

―Ya veo… ―dijo cuando dejó que las palabras de Jacky le llegaran, pensando seriamente en si dejar que su pokémon se divirtiera, pero es que preferiría que no fuera con gente que no conociera porque así ella se metía en problemas… Agh, qué dolor de cabeza. Pero quizás la líder tenía razón, quizá calmarse un poco con eso de regañar a su Wartortle no estaría mal…

Zorua empezó a carcajearse por lo dicho, aunque Blue no tenía la menor idea del por qué, probablemente cosas de entrenador con pokémon que tenían en privado, por lo que le sonrió recordando algunas cosas que también había pasado con su Wartortle, aunque con una mirada fruncida por parte de Jackye, el pokémon siniestro pareció apenarse, haciendo que la joven castaña soltara una risita.

Sin embargo, eso no le quitaba la vergüenza de su sarta de preguntas a la pobre Jackye, seguramente tenía el rostro como un tomate, aún recordaba esos días en que era discreta y no actuaba por sus impulsos… Salir de su ciudad le hizo mal… muy mal.

―Hielo… ―murmuró mientras pensaba en que ese no estaba en la lista temprana de los gimnasios que iría, ella no era demasiado buena con los lugares fríos y menos cuando las temperaturas estaban tan bajas como en Diamond―. ¿Tres castillos? ―preguntó sorprendida aunque no esperaba respuesta, seguro era inmenso, ¿los castillos serían de hielo? Vaya… le estaba entrando curiosidad―. ¿Bar? ―soltó una risotada cuando escuchó el susurro de Jackye, ella no parecía ser de las que tomaban pero quizá, como quien dice, las apariencias engañan.

Siguió escuchando a la líder mientras notaba que parecía ser muy divertido el gimnasio pues hablaba con bastante nostalgia y cariño, seguro que era porque le gustaba ese tipo de lugares… Aunque parecía que igual le gustaban los cálidos por lo dicho del Invernadero.

―¡Muchas gracias! Y pues… ―dijo riendo torpemente mientras rascaba con ligereza su cuello―. Voy por ahí… La verdad no tiene mucho que empecé, mis padres me hicieron terminar la escuela primero así que apenas ando empezando. Ni una medalla y mi equipo está bastante bien… para mí. Aunque aún quiero capturar más pokémon antes de empezar, esto de retar un gimnasio me emociona mucho y quiero estar súper preparada ―agregó alzando un poco la voz.

Aunque apenas terminó de hablar y escuchó unas personas que salían corriendo, seguramente otros visitantes del Invernadero, pero era bastante extraño. Hasta que escuchó la palabra “Fuego”, ahí la joven comprendió todo.

―¡Tenemos que ir a ayudar, Jackye! ―exclamó la joven―. Yo iré a hacerlo… ¡no podemos dejar que este lugar se queme!

Mirándola una última vez, salió corriendo hacia el lugar del que todos huían, con su Wartortle siguiéndole de cerca.

El ver sonreír a mi acompañante mientras contaba o bueno mas bien respondía a sus preguntas me hacia sentir feliz, ¿Razón? Yo de rara como siempre, pero por lo menos no ver esa típica cara de aburrida que a veces coloca la gente me hacia sentir alegre; Afirme sin mas al escuchar su pregunta, puede que suene algo extraño e increíble el tener 3 castillos a mi disposición pero de seguro en estructura era la menor de los otros gimnasios, en todo caso, desconocía si era cierto o no.

Salí de mis pensamientos al ver que Blue respondía sin problema alguno todas mis preguntas, sonreí de manera orgullosa al escucharla, el saber que estaba preparada y que tenia unas ansias increíbles de ser la mejor entrenadora me hacían recordar viejos tiempos. Pero no todo es color de rosa, en un abrir y cerrar de ojos se comenzaron a escuchar gritos cerca de nosotros y como si fuera poco, varias personas pasaban por nuestro alrededor corriendo en dirección a la salida, tal cual película de acción.  -Esto es malo- Fruncí el ceño mientras empuñaba mis manos -Regresen ustedes, todos menos tú- Guarde a todos en sus respectivas Pokeballs dejando así al gran Samurott por fuera, me seria de gran ayuda. De un momento a otro voltee a ver a Blue, quien como si fuera un fantasma ¡se había ido! -Pero que...- Susurre, pero, no era momento de regañar la por no esperarla para la acción debía alcanzarla haci que sin mas salí corriendo hacia la dirección contraria a los que huían -Zoru ve y ayuda a escapar a las personas o pokémon que encuentres- Esté afirmo y sin mas desapareció entre una de las "calles" del invernadero. Nosotros quienes mas nos acercábamos podíamos notar la gravedad de la situación, el techo se empezaba a oscurecer por el humo mientras que el calor aumentaba -¡Blue!- Me detuve a tan solo 5 metros del incendio, manteniendo distancia por seguridad; me preocupaba el echo de que mi compañera quedara atrapada entre las llamas -Jake, Chorro de agua hacia las llamas, tenemos que apagar esto- El gran Samurott tomo aire para luego comenzar su labor, y yo no me quedaría de brazos cruzados, comencé a buscar una llave con alguna manguera en ella o algún pote, cualquiera cosa que nos ayudara -¡Blue!....¿Estas bien?- Empece a toser por el humo, mas trataba de seguir adelante con paso apresurado.

Nunca había sido una joven impulsiva, pero el recordar que quizá había gente atrapada por el incendio hacía despertar un sentido protector hacia los demás que jamás hubo pensado que tenía. Ágilmente saltó los obstáculos a lo más profundo del lugar, escabulléndose por abajo o saltando encima de ellos, hasta que escuchó un pequeño llanto.

—¿Hay alguien allí? —exclamó la chica internándose lo más que podía—. ¡Wartortle, creo que hay alguien más lejos! —volteó para ver a su pokémon, pero éste había desaparecido haciendo que Blue dudara el continuar o no… sola—. ¿Wartortle? Estas bromas no son divertidas…

Su garganta empezaba a rasparle, haciendo inevitable el hecho de empezar a toser y respirar agitadamente por su boca, buscando aire limpio pero no había por ningún lado. Otro gemido de llanto volvió a llamarla, haciendo que sus ojos se dirigieran al lugar y empezar a moverse como podía. Sus párpados poco a poco le empezaron a pesar, haciendo que duraran más tiempo cerrados a medida de que pestañeaba, incluso sus jadeos eran audibles. La opción de sacar alguno de sus pokémon estaba totalmente descartada, sólo Wartortle podría sobrevivir en ese ambiente pero estaba desaparecido de su lado, ¿dónde estaría?

Llegó hasta donde una niña se veía casi desmayada, por lo que apresuró lo más que pudo el paso, llegando hasta ella.

—¿Qué haces aquí? ¿Y tus padres?

—F-Fui a buscar unas flores y de repente… m-mis padres ya no estaban —sollozaba la pequeña hasta que sus ojos se cerraron completamente—… quiero a mis padres…

—¡No duermas! —se agachó a su lado, sacudiéndola con la poca fuerza que le quedaba.

Blue comenzó a toser aún más fuerte, quedándose casi sin aire hasta que sus propios ojos ya no querían abrirse. La desesperación en su interior era demasiada, ¿tan mala idea había sido? Ni siquiera podía salvar a una pequeña niña del incendio.

Agarrando lo último que le quedaba de fuerzas, cargó a la pequeña en sus brazos, mientras se levantaba con pesadez y lentitud, caminando con tan poca velocidad que la frustración le estaba colmando. Mas partes del techo empezaron a caer, afortunadamente lejos de la chica, pero aquello tan sólo alborotaba el humo.

—War… Wartortle… —susurraba la chica—. Jackye…

Un sonido alarmante encima de su cabeza resonó, haciendo que mirara con temor el techo y se confirmó lo peor: una parte de él iba a caer encima. Dando unos pasos hacia atrás, el gran pedazo chocó contra el suelo con un feroz sonido que escuchó cada parte de su alma.

—Dios… —murmuró la chica a salvo, aún con la niña en sus brazos pero ambas tiradas en el hirviente suelo.

Unas lágrimas se asomaron en sus ojos, mientras veía que era casi imposible que alguien llegase para rescatarlas. Aún… aún no era suficiente, aún tenía cosas para vivir.

—Maldita sea.

Y sus ojos se perdieron en la oscuridad.

(…)

Wartortle se veía bastante desesperado, había perdido a su entrenadora y no tenía idea de qué hacer, más o menos sabía dónde se había dirigido pero ir solo no era buena idea. Y levantando su vista, encontró a la chica que había empapado, dirigiéndose a ella empezó a rogar que quisiera ayudarle a encontrar a Blue.

La chica pelirroja se veía amable, se veía fuerte, estaba seguro de que ella podría ayudarle, y cuando la alcanzó la empezó a jalar hacia un lado con una cara que prácticamente respondía a la pregunta de dónde la llevaba.

El humo se hacia cada ves mas espeso, dificultando de manera rápida la respiración de todo aquel que estuviera debajo de esa cortina la cual se sentía como un techo que te aprisionaba, llevándote a suelo a cada minuto que pasaba; era una situación horrible, el lugar estaba echo un caos; poco a poco el techo se fue desmoronando sobre nosotros, cayendo grandes pedazos de este al suelo, acompañados de los arboles y floreros que caían por el fuego y la calor tan sofocante .

Para mi suerte y la de Blue, aunque desconociera donde estaba en ese momento, pero por lo menos no se escuchaba mas gritos y voces, solo quedábamos nosotras para apagar aquellas llamas; Samurott se encontraba en eso mientras me seguía el paso, cada que podía me echaba agua para así aliviar el calor -E-esto es horrible- Tosía de manera mas frecuente mientras tapaba mi nariz y boca con mi antebrazo, no podía hablar alto sino mi garganta se resecaría y para mi mala suerte necesitaba ese método para así tratar de localizar a Blue. Los arboles caían sobre nosotros y si no fuera por nuestro actos de reflejos a máxima velocidad ya estuviéramos sepultados en uno de esos troncos en llamas y techos caídos. Se que antes había dicho que esto parecía una película de terror pero por mas que fuera ni se lo deseaba a mi peor enemigo. Apresuramos el paso tratando de encontrar a quien casi golpeaba hace solo unos minutos con una maceta, no podía dejarla, mi código de honor y mi alto nivel de confianza y preocupación que agarro con rapidez hacia alguien no me dejaban irme y colocarme a salvo junto a mis compañeros.

Tanta era la caminata que tuvimos que tomar un descanso en lo que parecía la boca del huracán, ya que poco se sentía el humo del fuego -Estoy preocupada....- Susurre mirando a mi alrededor buscando señal de mi zorro y mis acompañantes...nada. Por un momento me dio un ataque de tos por lo que tuve que afincarme de un pilar cercano, el humo ya estaba en nuestros pulmones, mas tiempo aqui y la cosa se colocaría peligrosa. Todo estaba en silencio, solo se lograba escuchar el fuego, la madera y los techos caer, pero un sonido en particular llamo nuestra atención y un jalón de su parte en mi ropa me hizo entender todo -Wartortle...- Lo mire algo desconcertada y a la ves aliviada de ver que estaba a su salvo, pero ese sentimiento de paz no duro mucho, su cara lo decía todo y no podíamos perder mas tiempo. Mire por un momento a Samurott para luego afirmar con nuestras cabezas dando una sonrisa confiada y como si hubiéramos retomado fuerzas salimos corriendo, no perdí el tiempo en seguir le el paso a Wartortle, su velocidad me estaba queriendo decir lo peor y aun así trataba de ignorar ese echo.

[...]

Aquel zorro de colores oscuros de mirada orgullosa y a su ves tenebrosa había terminado su labor, por lo que regreso buscando a su querida entrenadora encontrando algo diferente pero de igual importancia, una chica tirada en el suelo tomando en brazos algo o alguien; su olor, por mas que el humo estuviera espeso esa nariz supo identificar ese olor, era la chica castaña que había conocido hace tan solo unos momentos y mas arriba el techo que caía sobre ellas.

[...]

Nuestro correr fue obstaculizado por los infinitos obstáculos que se colocaban en nuestro frente, algunos solo destruidos otros en llamas; tome la decision de montar a Samurott era mas sencillo y en el transcurso lograríamos ir apagando las cosas. Mi posición sobre el era inclinada completamente, observando desde el costado de su cuello, poco veía pero lo que lograba ver era suficiente. La vimos...la localizamos, y sobre ella un ser oscuro quien con su pata derecha la terminaba de cubrir de un pedazo de techo caído -¡Zoroark!- Grite bajando con rapidez de aquel pokémon de agua y ayudando al zorro a quitar los pocos pedazos de techo que quedaban sobre ellos -Me alegra que estés bien- Un abrazo rápido y nos concentramos en la joven castaña quien con apariencia inconsciente abrazaba a una niña de igual circunstancias -Carga tú con la pequeña, ya has echo suficiente...Samurott encargarte de despejar el camino junto a Wartrotle y si pueden, traten de apagar las llamas mas grandes- Ambos afirmaron y se pusieron en marcha, Wartrotle quien no se separaba de su entrenadora con suma cara de preocupación trataba de levantar la con poco éxito -Saldremos de aqui...no te preocupes- Sonreí de manera tranquila hacia él tratando de calmarlo un poco; como pude cargue a Blue sobre mis espaldas y como si nos hubiéramos comunicado telepaticamente Wartrotle lanzo su chorro de agua hacia ambas, tratando y probando a ver si así su amada entrenadora despertaba; pero era claro que esperar sentados no era una opción, por lo que empezamos a caminar a paso apresurado apagando el fuego en el transcurso, agracia tener a dos pokémon de agua a mi favor y aun mas, a Zoru quien cargaba con cuidado a la pequeña quien poco a poco iba despertando -Vamos Blue, despierta...no puedo creer que te dejes ganar por una pequeña- Empece a exclamar palabras de "animo" quien sabe, capaz y lograra escucharlas y despertara -Ya veo porque no quieres despertar...sabes que el regaño que te vas a llevar de mi parte sera grande ¿No?- Sonreía de manera confiada mientras la miraba de reojo -No puedes quedarte así para siempre...Wartrotle te necesita...y se que alguien allá afuera tambien te necesita...vamos Blue...- Al no ver reacción comenzaba a frustrarme con rapidez, la preocupación, el calor, la angustia y el cansancio junto a una chica que por mas que fuera su situación no me estaba respondiendo con rapidez...malas combinaciones -¡Blue despierta!- Fruncí el ceño mientras hacia un movimiento en mis brazos para lograr cargarla mejor en la espalda, si no la despertaba de esa forma entonces tomaría medidas drásticas.

(…)

—Blue, ¿estás segura que quieres ir? Puedes quedarte aquí y trabajar en alguna de las empresas de tu padre. Tú sabes que puedes elegir lo que desees, querida. —las palabras de mi madre hicieron que no sostuviera la mochila que había preparado para mi viaje. Haciendo que volteara a verla mientras ella estaba mirando hacia otro lugar, estaba a punto de irme por un largo tiempo, ya me había despedido de mis padres y mis hermanos pero ella había decidido seguirme e intentar convencerme de que no fuera.

—Quiero viajar… Conocer el mundo, conocer otras personas —le respondí tomando lo que me faltaba para después acercarme a darle un beso en la mejilla, notando con tristeza unas lágrimas que empezaban a salir de sus ojos. No podía verla llorar durante mi partida, por lo que diciendo unas palabras de despedida, tomé mis cosas y salí de mi casa… Rumbo hacia mi aventura.

(…)

Podía sentir el calor colmando su cuerpo poco a poco, rogando silenciosamente un poco de agua para calmar lo que sentía: su interior empezando a hervir, su piel arder como si el fuego ya hubiera hecho contacto con el mismo, calor insoportable. La necesidad de levantarse y correr hacia aire fresco era alarmante a la par de inútil, pues ella yacía tirada con una pequeña en sus brazos.

No sabía exactamente cuánto tiempo llevaba allí, era terrible tener conciencia mientras sabías que quizá todo podría acabar mal, pero su cuerpo no respondía. Era como estar y no estar al mismo tiempo. Pero en algún momento pudo escuchar a alguien moverse encima y después unas voces más… Y ella las conocía. ¿Quiénes eran? «¿Madre? —pensó, pero era imposible…».

Unas manos la tomaron, para después sentir su cuerpo apoyarse en algo que se movía lentamente y finalmente sus plegarias fueron escuchadas. Agua fresca chocó con su piel mientras el alivio empezaba a recorrer su cuerpo, pero éste no hacía caso para reaccionar. Seguía tieso mientras la joven usaba todas las fuerzas que tenía para usarlo, pero seguía pareciendo inútil el intentar hacer algo.

Poco a poco pudo reconocer quién le hablaba: Jackye, la líder de gimnasio hielo; su compañera en ayudar en el incendio que ahora le ayudaba para salir del embroche en que se metió. Con unas palabras de amenaza sobre un futuro regaño, ¿llegaría acaso? ¿Alcanzaría ella el regaño? ¿Sobreviviría? Estaba segura que sus pulmones estaban repletos de humo, inclusive podía sentir su piel con quemaduras aliviadas por el agua que le llegaba. Unas lágrimas invadieron sus ojos cuando descubrió que realmente no sabía qué pasaría después de eso.

Unas ganas de quedarse dormida le llegaron, de simplemente ya no despertar.

—No puedes quedarte así para siempre...Wartortle te necesita...y sé que alguien allá afuera tambien te necesita...vamos Blue...

¿Wartortle? ¿Estaba bien? ¿Dónde estaba? Fue entonces que el agua que le llegaba empezó a hincharle su pecho de amor hacia su pokémon. Era él el que lo lanzaba, el que estaba detrás intentando aliviar su dolor. Y unas imágenes de su familia pasaron por su mente, hasta la despedida de su madre. Y por último… un chico con cabellos castaños en un paisaje calmado y relajador.

—J-Jackye —su voz sonó tan rasposa como estaba su garganta, pero después una serie de toses compulsivas empezaron a atacarla haciendo que dejara de hablar.

Mientras más se alejaban de la zona de peligro, desvió su mirada hacia donde estaba Zoroark, quien en sus brazos cargaba a la niña que lloraba, su razón hacia la misión suicida estaba despierta viendo al pokémon admirada, para después voltear a ver a Blue sonriéndole con lágrimas en sus ojos llenos de agradecimiento.

Había… valido la pena.

Saliendo del invernadero, donde los bomberos ya trabajaban en el lugar una pareja se acercó corriendo al Zoroark, la mujer lloraba de felicidad mientras tomaba a su hija en brazos, abrazándola mientras su padre hacia lo mismo a ambas.

—Lo… logré —murmuró sonriendo—. Lo logré, Jackye. La salvé… Lo hice.

Débiles sollozos salieron con su voz, mientras pequeñas lágrimas mojaban sus mejillas y finalmente se apoyaba en su nueva amiga para abrazarla con fuerza. Asimilando poco a poco todo lo que le había pasado.

¿Carrera de Obstáculos? ¿Las olimpiadas de Khannos 2014? No señores, ¡la huida y el intento de sobrevivir de un incendio! ¿Que mejor que eso? Nada, supongo. Se que suena exagerado, pero por poco y ganábamos medalla de oro por todos los obstáculos que esquivábamos y la velocidad en que corríamos, Usain Bolt se quedaría loco si nos viera. El escenario que estábamos dejando atrás causaba escalofríos, con las pocas oportunidades que tenia de voltear podía apreciar de que era de lo que lográbamos escapar; Todo estaba oscuro, no solo por el humo sino literalmente todo estaba oscuro, Samurott y Wartrotle habían logrado en lo que podían, apagar las mayoría de las llamas, el camino que estábamos dejando solo se encontraba repleto de cenizas y cosas quemadas, lo único que nos preocupaba era el frente en donde las llamas aun seguían vivas tan cual el fuego de un Dragón.

-Tsk...- Al girar mi vista hacia la derecha dirección al fuego podía ver varias cosas ¿Explotando? Eso no tenia el mas mínimo sentido y aun así estaba ocurriendo, quien sabe si esa era la razón del porque el incendio. ¿Preocupada por las explosiones? Mas estaba preocupada del saber que la chica a quien cargaba aun no despertaba y que el poco aire limpio que nos quedaba se estaba acabando, quien sabe si a todos le sucedía lo mismo pero mi vista se estaba oscureciendo, ¿Rendirme? ¿Y dejar en este infierno a mis amados compañeros y a las chicas quienes aun tenían mucho por vivir? -Jah...no me rendiré tan fácilmente...- Comencé nuevamente a toser, bajando mi velocidad -Un reto mas...del cual saldremos victoriosos...- Mire de reojo a la chica tratando de sonreír -No...- Como pude comencé nuevamente  a acelerar el paso siendo empujada por la nariz de Zoru y teniendo en mi frente al tanque de agua de Samurott y en nuestra retaguardia al pequeño acuático quien cuando podía nos lanzaba agua para aliviar el calor -Así...así tenga que sacarlos a todos a patadas...no me rendiré- Comencé a tropezar por lo que no podía evitar fruncir el ceño y molestarme con mi propio cuerpo quien fallaba cuando mas lo necesitaba -"J-Jackye"- Escuche su voz a mis espaldas, era ella...había despertado, una gran sonrisa de alegría se dibujo en mi rostro mientras que mi mirada se tornaba cálida y tranquila -Jump...ya era hora...Tranquila, Titania te sacara de aqui- Fruncí el ceño confiada mientras sonreí alegre y victoriosa, tomando nuevamente el paso acelerado.

En el camino hacia la salida me seguía preguntando por que era así...porque me comportaba tranquila y segura hacia los demás cuando en mi interior mi alma salia corriendo. Un defecto del cual tambien agradezco tenerlo...de esa forma lograba darle confianza y valor a quienes me acompañaban y eso era suficiente, ademas, siendo una Líder debería dar el ejemplo de lucha ¿No? Pero, mas allá de eso mi espíritu de guerra y deseo de diversión acompañados de las ansias de nunca rendirse, ayudaban a que esa imagen que daba a los demás me sirviera para lograr salir de apuros en donde quedarse paralizado era la peor de las opciones.

Despues de una larga caminata, la cual maldecía al arquitecto que construyo un Invernadero tan grande y a su ves tan hermoso. Logramos ver...¿Luz?, si era luz, no naranja o de color peligroso, era luz de salvación. Y como si estuviéramos de primeros en una carrera, dejamos al fuego atrás saliendo por fin de aquel infierno. La luz nos dejo ciegos por unos instantes mas al acostumbrarnos pudimos suspirar de alivio, no sin antes tomar unas buenas bocanadas de aire fresco, limpio y sano.

Deje a Blue en el suelo aun apoyada en mi, mientras acariciaba y daba Bayas de agradecimiento a los dos Pokémon tipo Agua, quien sabe que hubiéramos sido sin esos dos; de reojo pude notar a la familia de la pequeña quien se acercaba a Zoru agradeciendo con suma alegría, del otro lado pude notar a los Bomberos terminando de apagar aquel descontrol pero un murmuro me hizo volver a mirar a la chica quien estaba en mis brazos -Si...Te felicito, hiciste un gran trabajo- Sonreí tranquila y orgullosa de su valentía, moleste su cabello con mi mano en señal de aprobación.

La brisa era refrescante y el cielo despejado, el aire que entraba en nuestro pulmones era glorioso, néctar de dioses; Sentí un abrazo cálido que poco a poco tomaba fuerza, no pude evitar dejar soltar una lagrima por mi mejilla derecha, por mas que fuera el caso, estábamos vivas...logramos salir de aquel lugar y una pequeña vida estaba salvada, la abrace como si la conociera de años, como si se tratara de una hermana menor, mi sonrisa amplia no podía demostrar otra cosa que suma felicidad...Valió la pena que se fuera sin avisarme...Sin avisarme...Ahora lo recordaba todo, se coloco en peligro por no esperar, por tan siquiera formar un plan las dos, no...ella tenia que irse sola; Fruncí el ceño mientras dibujaba una sonrisa algo...molesta, la separe un poco de mi y tal cual fuera un demonio, de mi sobresalía un aura de enojo, alce mi mano derecha para luego darle un pequeño golpe con el puño sobre su cabeza -¡Y eso es por preocuparme de esa manera!- Cualquiera que no nos conociera diría que era su hermana mayor -Y este otro por no esperarme- Le di otro golpe para luego jalar ambas mejillas -Preocupaste a tu compañero, me preocupaste a mi, a Zoru y a Jake- De momento comencé a calmarme para luego bajar un poco la mirada y al instante subirla sonriendo -Pero valió la pena- Mi sonrisa ahora era tranquila, tome su cabeza y choque con cuidado su frente con la mía -No arriesgues tu vida sabiendo que puedes herir a otros si te pasara algo- Me separe de ella y me levante para luego extenderle la mano -Que seria de ese chico sin ti ¿Eh?- Le guiñe el ojo burlándome de ella, desconocía si tenia un chico o no, lo sabría con su reacción. Zoru quien logro acercarse a nosotros no pudo evitar darme lenguetazos todo animado, haciendo que de inmediato me echara a reír -Y ustedes tres, gran trabajo- ¿Saben de esos abrazos de osos? Bueno, de esos mismos le di a esos tres.

El aire tan cálido y tranquilizador corría por el lugar mientras sentía cómo Jackye correspondía su abrazo con una emoción tan parecida a la suya. Poco a poco sentía cómo su cuerpo tomaba vida y le permitía hacer movimientos no muy bruscos, su cara recuperando el color mientras se relajaba en el suelo con el apoyo silencioso que le otorgaba la líder de gimnasio.

Bruscamente Jackye separó a la castaña de ella, viéndola con una sonrisa algo tenebrosa y con su cuerpo rodeándola como una sombra que parecía gritarle que estaba en grandes, graaandes problemas. Alzando su brazo, la pelirroja lo bajó hasta darle un golpe en su cabeza, suave pero igualmente daba a entender su significado, para después empezarla a regañar sobre lo que había hecho como si fuera su hermana o algo parecido.

—Pero si… —otro golpe aterrizó en su cabeza y luego sus mejillas fueron estiradas con más palabras duras sobre preocuparla a ella y todos los demás.

En un momento dejó las mejillas de la joven paz y sonriéndole chocó su frente con la de ella haciendo que Blue sintiera de nuevo lo que era estar en casa, en un… hogar.

—No lo haré… —murmuró mientras levantaba su mirada y tomando su mano se ponía sobre sus pies.

Cuando Jackye volvió hablar hizo que inmediatamente el rostro de la joven se pusiera del color de su cabello: un rojo escarlata brillante; al tiempo que su corazón aumentaba su pulso hasta sentir que casi se salía del pecho.

—¡N-No hay ningún chico! —dijo agitando sus brazos por todos lados mientras Wartortle se acercaba con expresión curiosa para después sonreír con maldad—. ¡No hay nadie! Y-Yo… creo que… Ugh —desvió la mirada mientras jugaba con uno de los mechones en la frente—. No entiendo lo que dices.

Después soltó una risa nerviosa, Blue realmente no sabía muy bien cómo reaccionar ante tales sentimientos pero decidió pasar del tema mientras veía a la gente con los bomberos en el invernadero.

—Al menos todo salió bien… —dijo—. Hacemos un gran equipo, líder hielo, Jackye Onell —bromeó mientras le codeaba con ligereza.

Lo bueno, fue que al final todo había salido bien, y eso lo agradecía mucho.